La ciudad de París vivió mucha conmoción poco antes del medio día, pues se registró un tiroteo contra un centro cultural kurdo que dejó tres muertos y tres heridos. El incidente tuvo lugar en la calle Enghien, en un barrio bullicioso con comercios y muchos residentes originarios de Kurdistán. Aunque las autoridades locales ya detuvieron a un hombre de 69 años, sospechoso de haber cometido tal crimen, la Fiscalía de la zona abrió una carpeta de investigación para esclarecer los hechos. Las autoridades informaron que el sospechoso tiene antecedentes policiales, incluido un arresto por atacar a inmigrantes que vivían en tiendas de campaña. Se cree que, posiblemente, hubo un motivo racista para el tiroteo.
Así ocurrieron los hechos
El tiroteo ocurrió al mediodía en un centro cultural kurdo, en un restaurante y una estética cercanos a la zona, según la alcaldesa del distrito 10, Alexandra Cordebard. En un improvisado anuncio a la prensa, declaró ante los periodistas que la “verdadera motivación” del tiroteo seguía sin estar clara. Mientras hablaba, una multitud cercana coreaba: “erdogan, terrorista”, refiriéndose al presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, también acompañaron su protesta con: “estado turco, asesino”.
La policía acordonó el área en el distrito 10 de la capital francesa. En las fotografías proporcionadas por las agencias podemos observar como la calle era sumamente concurrida, llena de restaurantes y cerca de la estación de tren Gare de l’Est. Por lo que tenía varios momentos de gran actividad debido al próximo fin de semana navideño. La autoridad de París advirtió a las personas que se mantuvieran alejadas del área.
Por su parte, la fiscal local, Laure Beccuau, confirmó que tres personas fallecieron, que una más estaba en estado crítico y otras dos estaban hospitalizadas con lesiones menos graves. «El atacante también resultó herido en la cara», puntualizó. Asimismo indicó que los fiscales antiterroristas están en contacto con los investigadores, pero no han indicado ninguna señal de un móvil terrorista. Cabe destacar que el detenido es un maquinista jubilado de nacionalidad francesa y es conocido por dos intentos de homicidio cometidos en 2016 y diciembre de 2021.
La primera ministra francesa, Élisabeth Borne, calificó el tiroteo como un acto «atroz» y expresó su pleno apoyo a las víctimas. Por su parte, el ministro de Interior, Gérald Darmanin, que se encontraba de viaje en el norte del europeo país, informó por Twitter que regresaba a la capital «por el trágico tiroteo ocurrido esta mañana». Y es que medios locales apuntan, que en pleno despliegue policial, varios miembros del centro cultural Ahmed Kaya, los civiles lloraban y se abrazaban para consolarse. Un periodista de la agencia AFP puntualizó que algunos de ellos se dirigían a gritos a la policía y les decían:
«Esto vuelve a empezar, no nos están protegiendo, nos están matando».