Un joven ruso y su novia ucraniana se casaron en Tijuana, Baja California. Ambos se comprometieron antes de que iniciara el conflicto bélico entre sus naciones de origen, y decidieron unir sus vidas a más de 10 mil kilómetros de distancia.
Semen Bobroski, nació en Rusia y Daria Sakhniuk, su ahora esposa en Ucrania. Ambos huyeron y su camino los trajo a Tijuana, donde contrajeron nupcias en el registro civil de esta ciudad fronteriza.
Ellos esperan cruzar juntos a Estados Unidos, de lo contrario solo ella podría hacerlo, toda vez que las autoridades estadunidenses solo están ingresando a ciudadanos ucranianos casi de forma inmediata, cosa que no sucede con los rusos, que también salieron huyendo de su país y han llegado a México con la intención de cruzar al vecino del norte.
El joven Bobroski después de realizado el matrimonio dijo que “tuvieron que demostrar que tenían una relación desde noviembre del 2014, mostraron fotografías y sus redes sociales. Sabe que al ser ruso debe demostrar que es distinto y manifestó que ha sufrido para adquirir pasajes de avión debido a qué hay aerolíneas que se negaron a venderle boletos porque suponen que apoya a (Vladimir) Putin y sus políticas.
El proceso para reunir sus documentos y casarse en Tijuana no fue sencillo según comentó y agradeció el apoyo de quienes le ayudaron a reunir los requisitos y ya con eso espera llegar en poco tiempo a Estados Unidos.
Su deseo, dijo, es llegar y trabajar. Su esposa Daria es administradora en clínicas dentales. Ambos agradecieron el cariño y apoyo recibido en Tijuana luego de haber escapado de la guerra hace dos meses.
