El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, lamentó la decisión rusa de suspender el cumplimiento del New START o START III, el último tratado de desarme nuclear vigente entre Rusia y Estados Unidos de América (EUA), e instó a Moscú a reconsiderar su decisión y “respetar los acuerdos existentes”.
Jens Stoltenberg aseguró que la suspensión del cumplimiento por parte de Rusia del New START o START III supone que la arquitectura de control de armas ha quedado «desmantelada».
Stoltenberg también reconoció que el paso anunciado hoy por Moscú hace del mundo un lugar «más peligroso»:
Más armas nucleares y menos control de armas hacen el mundo más peligroso
Agregó que, por ese motivo, la OTAN ha trabajado «tan duro» para que Rusia se implique en cuestiones relacionadas con el control de armas y los aliados respaldaron el New START: «Por eso también pido hoy a Rusia que reconsidere su decisión de suspender su participación en el New START«, insistió.
Recordó que ese tratado es «uno de los últimos grandes acuerdos de control de armas» aún existentes, después de que Rusia «empezara a violar» el tratado para la eliminación de misiles nucleares de medio y corto alcance (INF), lo cual «condujo a la desaparición» de ese convenio «hace unos años».
«Ahora están suspendiendo el otro gran tratado de control de armas nucleares», dijo sobre el New START, y consideró que este martes se ha visto «otro ejemplo de que estamos apartándonos de la arquitectura de control de armas, del orden internacional basado en normas, que nos ha llevado décadas construir paso a paso y acuerdo por acuerdo».
Aseveró que la combinación de que Rusia «viole algunos de estos pactos», en referencia al INF, y la salida del New START «hace el mundo más peligroso y destaca la importancia de que permanezcamos juntos todos los países que creemos en el orden internacional basado en normas, en la libertad y la democracia».
Putin matizó que «Rusia no abandona, sino que solo suspende» el cumplimiento del tratado sobre reducción de armamento estratégico ofensivo que expira en 2026 y culpó a Estados Unidos de esta decisión: «Si EUA realiza ensayos nucleares con nuevos tipos de armamento estratégico, Rusia también lo hará».