Por disputa de tierras encabezada por Fernando Barbachano, el INAH suspendió obras de restauración e investigación en esa zona importante para el Tren Maya, en Yucatán
Casi una semana ha pasado después de que trabajadores del Hotel Hacienda Chichén, propiedad de la familia Barbachano, cerraron el acceso al área denominada Chichén Viejo o Grupo Serie Inicial, de la Zona Arqueológica de Chichén Itzá, lo que ha provocado la suspensión de las obras de restauración e investigación por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
La historia de la disputa se remonta al año 2010, cuando el Gobierno de Yucatán realizó un contrato de compraventa con la familia Barbachano, adquiriendo 83 hectáreas de la zona arqueológica de Chichén Itzá por 220 millones de pesos. lo que significaba un paso importante para la transformación del sitio arqueológico por parte del INAH y ponerlo a disposición de los visitantes. Sin embargo, 13 años después, la familia se ha negado a entregar estas tierras, lo que ha generado un conflicto con el gobierno federal.
Esto ocurre a tan sólo tres semanas de que el presidente Andrés Manuel López Obrador inaugure esta obra, considerada parte de los atractivos turísticos del Tren Maya en Yucatán.
A pesar de las negociaciones en curso, el acceso al Grupo Serie Inicial ha sido bloqueado con una manta que advierte sobre la propiedad privada y las posibles consecuencias legales para los invasores.
La situación también involucra aspectos legales, ya que el Código Penal de Yucatán establece sanciones para el allanamiento de morada con violencia. Este conflicto pone en peligro el progreso de las obras de restauración e investigación en Chichén Viejo, un complejo habitacional de rica herencia arqueológica que albergó a figuras destacadas de la cultura maya.
El director de la zona de monumentos arqueológicos, José Francisco Osorio León, corroboró que fue el pasado jueves 10 de agosto cuando la zona fue cerrada, por lo que continúan las negociaciones para continuar con los trabajos, como parte del Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza).
Es a la entrada del Grupo Serie Inicial que fue colocada una manta con un aviso: “Propiedad privada. Los invasores serán procesados conforme a la ley”.
La disputa por las tierras y el cierre del acceso a Chichén Viejo plantean interrogantes sobre el futuro de este importante sitio arqueológico y su contribución al proyecto del Tren Maya en Yucatán.
La resolución de este conflicto será fundamental para garantizar la conservación y preservación de la rica herencia cultural que representa Chichén Viejo.